- MORTE A VENECIA
- 1971 · Italia, Frantzia · 124 min. · Gay
- Zuzendaria eta ekoizlea: Luchino Visconti. Gidoilariak: Nicola Badalucco, Luchino Visconti, Thomas Mannen nobelaren adaptazioa. Argazkia: Pasqualino De Santis. Musika: Franz Lehár, Gustav Mahler, Modest Mussorgsky, Ludwig van Beethoven.
- Antzezleak: Dirk Bogarde, Romolo Valli, Mark Burns, Nora Ricci, Marisa Berenson, Carole André, Björn Andrésen, Silvana Mangano, Leslie French, Franco Fabrizi, Antonio Appicella, Sergio Garfagnoli, Ciro Cristofoletti, Luigi Battaglia, Dominique Darel
Tras sufrir una crisis creativa, el compositor y director alemán Gustav Von Aschenbach, inspirado para la película en la figura de Gustav Malher, llega al Lido de Venecia para pasar una temporada de vacaciones en solitario, con el fin, no sólo de reflexionar, sino también de dar descanso a un cuerpo extenuado y enfermo. En el Hotel Des Bains llama su atención una familia de turistas polacos, especialmente el joven Tadzio, un bellísimo adolescente por el que siente una súbita e intensa atracción. El efebo adolescente despertará una de sus grandes obsesiones, la búsqueda de la belleza y trastocará sus planes de descanso. Al amor prohibido emergente entre el músico y el niño se le unirá, como inevitable y tormentoso final, la epidemia de cólera que llegó a Europa a mediados del siglo XIX.
El clásico de Thomas Mann “Muerte en Venecia” fue la base sobre la que Luchino Visconti construyó en 1971 un monumento cinematográfico homónimo, hermano mayor de su referente literario, donde la muerte vestía de marinerito. No existe mejor obra para conducirnos a esos versos de August Von Platen que dicen: "Aquél que ha contemplado la belleza está condenado a seducirla o morir". La ascensión hacia la belleza, en medio de un contexto socialmente hostil, es el marco en el que se mueve el compositor Gustav. Visconti interpreta la sensible historia del músico enamorado del adolescente Tadzio como plenitud y final de una época espiritual y artística, donde la burguesía llevaba en si los gérmenes de su propia destrucción. “Muerte en Venecia” es una de las obras fundamentales de Visconti y uno de los encuentros más logrados de cine y literatura. La película posee un colección de las más bellas imágenes jamás filmadas, y es un total alegato a la sensibilidad y la apreciación de la belleza.
El personaje del compositor está basado en Gustav Mahler, cuya hermosa Quinta sinfonía está presente como banda sonora a lo largo de toda la película, pasando a integrarse en ésta como una pieza imprescindible a la hora de transmitir las emociones y sentimientos que evoca. En la decadente e inspiradora ciudad fantasma de los canales, se enamorará platónicamente del adolescente Tadzio, de sobrecogedora belleza andrógina. Vagará contemplando la hermosura del muchacho y de la propia Venecia, saboreando el declive progresivo de ésta y asimismo el de su propia vida, cercana ya a su final.
Tanto la novela original como la película constituyen, aparte de un relato narrativo de los sucesos acontecidos a Gustav durante su estancia en Venecia, una ilustración, oda, alegato y homenaje a aquella belleza perfecta, pura y plena de la que hablaba Platón: Gustav se encuentra frente a la belleza inalcanzable, aquélla que es bella por sí misma. Esta belleza es perfecta; por ello Tadzio, el objeto de obsesión de Gustav, no cambia palabra con él; ya que el sentido de perfección no posee un carácter mundano, sino que va más allá de éste. Es un sentido trágico, en donde Gustav, al haber participado de la idea de lo bello en sí, encuentra que su razón de ser y vivir ha llegado a su plenitud, por lo que decide recrearse en contemplar esta belleza, pese al hecho de encontrarse en el macabro escenario de una ciudad en plena epidemia de cólera.
No comments:
Post a Comment